"Que toda vida es sueño y los sueños sueños son? "

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sábado, 29 de mayo de 2010

Perú I. Arqequipa-Colca-Titicaca

Del 14 al 23 de mayo
Arequipa-Cañón del Colca-Puno-Amantaní

El día 12 de mayo agarramos un bus para salir de Bolivia en dirección Perú. Estando en la parte boliviana del lago Titicaca, ya estábamos muy cerquita de la frontera con Perú. Una frontera muy fácil y en la que no tuvimos ninguna complicación.

Nos dirigimos a Arequipa, la segunda ciudad más grande de Perú, con 1,7 millones de habitantes. La llaman la ciudad blanca por sus construcciones de piedra volcánica de este color y también la ciudad de la eterna primavera, por su cálido clima.



Aún así, está a unos 2500msnm, y se encuentra rodeada por varios volcanes de la cordillera volcánica de los Andes. El más famoso es el Misti, a unos 5.800metros. En él viven los apus ( o espíritus) que protegen la ciudad, aunque la gente no le quita el ojo no sea que despierte... Dicen los expertos que, aunque en estos momentos solo eche fumarolas de vez en cuando, se espera una erupción en un futuro no muy lejano. Y esto implicaría la destrucción de más de 9 comunidades que se han construido sus casas en sus laderas.



El motivo principal por el que empezamos por esta ciudad estaba bien justificado. El día 14 nos encontramos con las tietas de Tania, Carmen y Carmen, o Carmen al cuadrado, para más facilidad. Tania las fue a buscar al aeropuerto, con mucha emoción, ya que recibir familia o amigos para compartir con nosotros un pedacito de este viaje siempre es motivo extra de felicidad... Y ese día, el día 14, fue el día del último partido de liga, y momento decisivo para la liga. Una buena excusa tuvo Xavi para quedarse en el hotel y así no perderse ni un minuto de partido. Pero Murphy siempre está ahí, y esa mañana, desde las 6 de la mañana no había luz en la ciudad. Creíamos que no íbamos a poder ver el partido, pero finalmente pudimos verlo y celebrar la victoria, aunque claro que en Perú, y más siendo domingo por la mañana, el ambiente no era para tirar cohetes… Pero con un vermut, varias cervezas y mucha alegría, en Perú vimos al Barça campió! Visca el Barça!!

Era domingo, y como viene siendo común en toda Sur-América, poco hay que hacer ese día, más que pasear y ver cómo las famílias disfrutan su día de descanso en las principales plazas y cafés. Aprovechamos para comprar un par de libros interesantes en el quiosco de la esquina. No son auténticos, si no que son fotocopias y salen a unos 3€! Esto sí es una buena forma de promover la lectura...

El día siguiente, a las 3 de la mañana, salimos hacia el cañón del Colca, qué madrugón! El cañón del Colca es uno de los destinos de trekking más conocidos del Perú, al ser uno de los más profundos del mundo con unos 1200m de profundidad. Es además la tierra del cóndor, uno de los animales sagrados de la cultura andina. Verlos volar, que con sus alas estendidas pueden medir hasta 2m, es toda una muestra de elegancia. Decidimos pasar 3 días y 2 noches en el cañón conociéndolo de cerca.



Tuvimos que madrugar tanto ya que nuestro descenso del cañón debía ser por la mañana para asegurarnos de llegar a uno de los pueblos de dentro del cañón antes del anochecer. Nos demoró unas 6horas hasta llegar a Cabanaconde, podríamos decir que el pueblo más grande al filo del cañón, a 3200 msnm y desde el cual empezamos el descenso. En el camino, alcanzamos los 4.900metros; por suerte íbamos durmiendo y con los caramelos de coca, casi ni nos enteramos.

En toda esta región conviven dos comunidades principales, históricamente rivales entre sí, pero que ahora se relacionan sin problemas: los cabanas y los collaguas. Unos son originarios de los quechuas y los otros de los aymarás, y se distinguen principalmente por la forma de vestir. En el cañón predominan los cabanas, con sus trajes tradicionales muy coloridos y con unos bordados super exquisitos. Puedes distinguir si una mujer está casada o soltera por el pliegue de su sombrero. Algo muy cómodo para los hombres, verdad?



Nos llevó unas 4 horas el descenso hasta San Juan, donde íbamos a pasar la primera noche. Un pueblo diminuto y que aunque ya tiene luz desde hace unos 2 años, todavía mantienen su forma de vida tradicional, cuya subsistencia se dedica básicamente al cultivo de maíz, quinua, y patata en las terrazas del cañón.



La vida dentro del cañón es muy dura, más de lo que nos podríamos imaginar. Todos los pueblos que están dentro están totalmente aislados del resto de civilización. Todo allí es carísimo, ya que todo tienen que bajarlo de Cabanoconde, arriba del cañón. La única forma de transporte es andando, o los que tienen suerte, en mula.

Dormimos en la casa de Rivelino, una familia que ha habilitado unas cabañitas para los visitantes. De esta famílía, sólo Rivelino frecuenta Cabanoconde para comprar. Los demás, dicen que suben como mucho 3 veces al año.

Todas la comunidades están conectadas por caminitos, que suben y bajan en zigzag por las montañas del cañón. Caminos impensables que sufrimos en nuestras carnes. El descenso fue durísimo! Acabamos con temblores en las piernas…



El segundo día en el cañón visitamos otros pueblos como el de Malata, donde pudimos probar la famosa chicha ( bebida de maíz), la bebida sagrada de los incas y el refresco actual más popular entre los peruanos.

Unas cuantas horas más caminando y llegamos al único oasis de la zona, un lugar natural habilitado para los turistas y caminantes lleno de piscinas y donde pudimos pegarnos un baño que nos supo a gloria, después de toda la caminata por el cañón.



Decidimos iniciar el ascenso del cañón (unos 1200m) subidos a las mulas, una experiencia cargada de adrenalina, ya que los acantilados subidos desde la mula se veían mucho más grandes….y tuvimos que aprender a llamarlas en quechua para que no se pegaran coces entre ellas. Se entiende por qué a estos animales les llaman burros…..porque lo son!, pero son animales muy fuertes y trabajadores, y aguantan un peso de hasta 120kg.




Una vez arriba, pudimos tomar una ducha de agua caliente y una buena cena bien merecida en Cabanaconde, donde dormimos la segunda noche.

El tercer día visitamos Chivay, el pueblo más importante de toda la región, donde nos hicimos un baño en las aguas termales naturales de la zona, y de vuelta a Arequipa.

Allí disfrutamos de la cena muy bien acompañados, con Xavi y Enca, nuestros amigos de Esparreguera, que estaban también en Arequipa desde hacía unos días por un pequeña lesión en el ojo de Enca, y que por suerte no fue nada. Ellos iban hacia el Cañón al día siguiente, y nosotros hacia el lago Titicaca, again, pero esta vez del lado peruano.

Antes de partir, por la mañana, decidimos ir a visitar a una de las personas más inmortales de toda la histora inca : el cuerpo congelado de Juanita.

Juanita fue una noble inca que fue ofrendada a los dioses incas, y cuyo cuerpo se encontró en los noventa en el volcán Ampato, a más de 6000 metros de altura, gracias a que la erupción de un volcán vecino provocó que se deshiciera el hielo del volcán, y así quedó al descubierto un pedazo de historia muy importante de la época inca: los sacrificios humanos.

Los incas hacían ofrendas humanas a sus montañas, que creían vivas y era dónde los dioses vivían. Para que no se enfadaran, creían la necesidad de realizar este tipo de ofrendas con niños nobles, de la alta sociedad. Para las famílias y los propios niños, era todo un orgullo, ya que para ellos este hecho significaba que iban a pasar a formar parte de la divinidad y la reencarnación en su otra vida para ayudar a su pueblo. Es por ello que los entierros se hacían con todo el ajuar y los objetos más valiosos para estos niños; se llevaban todo aquello que pensaban les podría ser útil en su otra vida.

El ritual consistía en ascender a la cima de la montaña, se podía tardar varios días… Solamente subían los sacerdotes y el niño que iba a ser ofrendado. Una vez arriba se iniciaba la ceremonia. Al niño se le daba de beber chicha fermentada durante 2 años, para que cayeran en estado de insonsciencia. Luego tras las oraciones y rituales incaicos se les introducía en el agujero en posición fetal y se les golpeaba con la macana (una especie de mazo sagrado) en la cabeza para acabar con su vida y ofrendarlos así a la pachamama.

Es increíble pensar como hace más de 500 años, esta civilización podía escalar montañas tan altas sin recursos ni herramientas. Ellos fueron los verdaderos pioneros del andinismo, sin ninguna duda.

Después de esta interesante visita, nos pusimos rumbo al lago Titicaca, again, pero esta vez del lado peruano. Llegamos a Puno, a 3.800msnm, donde hicimos noche. Puno es el puerto principal desde donde coger los barcos a las diferentes islas del lago, un pueblo que podría entrar en el ranking de los más feos de Perú, aunque uno en especial que conoceremos más adelante compite con Puno por este galardón.

La mañana siguiente, bien temprano, nos fuimos al puerto a hacer negociaciones matutinas para ver quién podía llevarnos a Amantani, una de las islas más tranquilas del lago peruano.



No queríamos ir con ninguna de las agencias que presumen de darte los mejores precios para visitar las islas. Sus servicios son extra abusivos con las familias nativas de las islas; se aprovechan de ellos, y tardan meses en pagarles. Una buena mafia y nada bienvenidos por los locales de las islas. Preferimos dar todo el dinero íntegro a la gente de la isla.

Así que acordamos con Roberto que sería nuestro capitán, un nativo de la Amantaní, quién nos llevaría hasta la isla. Viajamos nosotros cuatro y una pareja de Lyon que también se apuntó. El capitán estaba muy contento y excitado, y nos pidió de parar en otra de las islas a la vuelta, y pronto entendimos porqué: había una fiesta muy importante para los amantinos, el Pentecostés!!

Es una fiesta católica, pero como siempre mezclada con las tradiciones indígenas locales, lo que hace de la religión en Sur-América bastante interesante. Atracamos en la pequeña playa de Amantaní, donde justo acababa de empezar la fiesta, y allí estaba ya todo el pueblo bailando, y como no tomando…el tomar es la base de cualquier celebración, la cerveza lo empapa todo.





La tradición del pentecostés es muy simbólica para la gente del lugar, ya que es el momento para bendecir todos los bienes materiales para que se multipliquen el año siguiente. Todos los grupos agrupan sus verduras, billetes verdaderos o falsos, y sobretodo piedras que recogen de la playa, muchas piedras, que simbolizan el dinero!!! Esta es la parte más curiosa, ya que con las piedras pueden hasta comprar helados o bebidas! Hay un capitán y su grupo con la cara teñida de negro que son los encargados de hacer las bendiciones en cada grupo con una voz surrealista y muy graciosa.

Después de las bendiciones, la gente pone las piedras en un saco, al que llaman el "banco internacional" y el capìtán tiene que velar toda la noche por su seguridad. Al dia siguiente, se reparte entre todo el pueblo, simbolizando la riqueza...



La gente vestía sus mejores galas y fue fantástico compartir este día con ellos en una isla muy auténtica sin muchos turistas. No hay hoteles ni hostales, duermes en casa de los locales y comes con ellos. Así que pasamos un día muy cultural y por la tarde también dimos unos paseos por la pequeña isla que vive básicamente de la agricultura y ahora empieza a recibir un poco de turismo.





Al día siguiente de nuevo barco dirección a Taquile, la isla vecina. Otra isla del Titicaca, con mucha tradición y cultura, pero más explotada turísticamente. En esta isla viven los hombres tejedores, son ellos y no las mujeres los que se encargan de tejer los trajes tradicionales.




Después de Taquile tras unas cuantas horas de barco visitamos las islas Uros. Un capricho natural ya que son islas flotantes construidas encima de la planta de totora, únicas en el mundo.



...finalmente regresamos a Puno y al día siguiente agarramos otro bus dirección El Cusco.
Nos esperaba una de las maravillas del mundo…

1 comentarios:

Anónimo dijo...

HOLA PEÑITA VEOS QUE OS VA MUY BIEN… todavia no he leido peru partII, pero tiene buena pinta, veo que naa de inseguidad verdad? Me han dicho un compi del elisava de Julia, que es colombiano, que no vayas para cartagena… es mUY turistico (pos i pensabais ir)… cerca hay mas zonas mas salvajes! ya os detallare.!

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